La pantalla de los nuevos iPhone está siendo objeto de diversos informes por parte de los analistas, que ven a estos nuevos modelos como la gran esperanza para reparar el fiasco del iPhone X. Ayer mismo a última hora, pudimos saber que se estaba planeando eliminar algunas de las funciones de los teléfonos más baratos. Todo con el fin de reducir sus precios de venta para hacerlos lo más atractivos posibles hacia el público que el iPhone X dejó atrás.
Sin embargo, no todo van a ser desventajas a la hora de saltar de generación. Y es que, además de un mayor tamaño de pantalla, esta nueva generación de iPhone llegará más resistente que nunca. Todo ello, gracias a un nuevo cristal frontal que le permitirá soportar mejor las caídas y lo hará más ligero. Combinado con un nuevo proceso de fabricación, podríamos estar ante uno de los iPhone más finos jamás vistos, algo que nos encantaría ver.
Todo esto, podría conformar un teléfono de lo más interesante, capaz de combinar el diseño del iPhone X, con la relativa accesibilidad de los precios de un iPhone 8. Si bien es cierto que, para que esto ocurra, tendremos que renunciar a una de las grandes bondades del buque insignia de Apple, el panel OLED, que estaría a punto de iniciar su producción para los modelos de más alta gama de la próxima generación. Un precio que muchos no estarán dispuestos a pagar.
En cualquier caso, aún faltan varios meses para que podamos conocer los datos oficiales, y aunque los informes de KGI Securities, de donde han podido ser extraídos estos datos, indiquen esta posibilidad, no podemos dar nada por hecho. Especialmente la parte de una resistencia mejorada, tras ver como los de Cupertino han tenido que tragarse sus palabras con respecto al diseño del iPhone X tras ver su inesperada fragilidad.
Vía | 9to5Mac
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