Hace unas semanas, nos hicimos eco de la típica noticia que solemos publicar todos los años y que siempre está relacionada con las pantalla de terceros de Apple. Aunque la compañía nunca reconoce que lo hace de forma intencionada, todas las versiones de iOS que lanza al mercado, tienen un código que reconoce si la pantalla, o cualquier otro dispositivo del terminal ha sido reemplazado por uno no original.
En ese momento, el terminal deja de funcionar convirtiéndose en un ladrillo cuya única solución pasa por una simple actualización que Apple lanza cuando ha saltado la polémica. Este año, Apple no podía faltar a su cita y nuevamente implementó la misma táctica. Al igual que en años anteriores, una vez salta es escándalo, lanza la correspondiente actualización que evita que las pantalla de terceros dejen de funcionar. Esta es la principal y única novedad de iOS 11.3.1.
Si eres de los usuarios que se ha visto afectado por esta manía de Apple, y que ha convertido tu iPhone en un pisapapeles, estás de suerte, ya que después de instala esta actualización, la entrada táctil de los iPhone que hayan experimentado un reemplazo de pantalla volverán a funcionar con total normalidad.
Este problema es más serio de lo que parece, ya que en Estados Unidos, varios estados quieren promover una ley que permita a todos los usuarios reparar sus dispositivos en cualquier servicio técnico, por lo que en el caso de Apple, vería como esa importante fuente de ingresos se reduce considerablemente.
En las notas de la actualización, Apple nos informa de que utilizar pantallas de repuesto no originales puede afectar a la calidad de la imagen y no funcionar correctamente, además de que si queremos mantener la garantía, el terminal siempre tiene que ser reparado por centros autorizados que utilizan piezas originales de Apple.
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