Este año, Apple ha mantenido silencio en lo que a las ventas inmediatamente posteriores al lanzamiento de los nuevos iPhone 7 y iPhone 7 Plus se refiere. Según la compañía, la descompensación que hay entre el número de unidades disponibles y el volumen de la demanda, contribuiría a aportar unos datos que no se corresponderían con la realidad. Esta situación, habitual todos los años, no ha sido inconveniente en épocas pasadas para anunciar a bombo y platillo récords de ventas. La deducción es evidente: la actitud de Apple nos hace sospechar que las ventas del iPhone 7 no alcanzarán, ni mucho menos superarán, a los récords marcados por los iPhone 6s y 6s Plus.
Y a pesar de ello, parece ser que las ventas podrían estar superando las expectativas iniciales de Apple, al menos es lo que también se deduce de aumento de pedidos de componentes para el iPhone 7 que la compañía ya habría efectuado de cara a alimentar nuestra fiebre consumista de la época navideña que ya asoma por la esquina.
Aumentan las expectativas para el iPhone 7
Según ha publicado DigiTimes, que últimamente parece saberlo todo, Apple ha aumentado sus pedidos de piezas y componentes para la serie iPhone 7 y iPhone 7 Plus: en concreto, los pedidos para lo que resta de año se habrían incrementado entre un 20 y un 30 por ciento por encima de las expectativas previas al lanzamiento. En Cupertino deben estar que no se lo creen, como un servidor, que también ve estas cifras con cierto escepticismo.
Citando fuentes procedentes de la compañía con sede en Taiwán General Interface Solution (GIS), una empresa subsidiaria del gigante Foxconn dedicada a la fabricación de paneles táctiles, Apple ha incrementado sus pedidos para el último trimestre natural de 2016, lo que significa que este proveedor también verá crecer de forma significativa sus ingresos por encima de lo esperado. Y con esto, ya tenemos a dos empresas muy contentas.
La demanda inicial para el nuevo buque insignia de los de Cupertino ha sido elevada, especialmente para el modelo iPhone 7 Plus, con capacidad de 128 GB, en negro brillante, y una cámara dual que, sin lugar a la menor duda, es su máximo atractivo. Tanta ha sido la demanda, o tan poca ha sido la oferta, que los tiempos de envío alcanza ya las varias semanas, superando incluso un mes para algunas regiones donde los nuevos terminales ya se encuentran a la venta. Y aquí haré un inciso: sinceramente, siempre he pensado que la escasez inicial de iPhone es una mera estrategia de marketing que alimenta las ansias de los usuarios.
El “modo granada de mano” podría ser la clave a este inesperado giro
Para algunos analistas, una de las claves de este incremento inesperado de las ventas se encontraría en el desastre protagonizado por Samsung y su Galaxy Note 7, un dispositivo que llegó a una decena de países afectado por un
problema de serie en su batería que, literalmente, le hacía explotar y quedar envuelto en llamas hasta formar un amasijo de materiales y componentes que más bien parecían el juguete de un escarabajo pelotero. Muchos de los usuarios afectados por el Note 7, habrían devuelto sus teléfonos y optado por cambiar a los nuevos iPhone 7 de Apple.
De acuerdo con una encuesta online realizada por SurveyMonkey, el 26% de los “arrepentidos” compradores del Galaxy Note 7 planeaban recuperar su dinero para invertirlo en un iPhone 7 o iPhone 7 Plus. Mientras tanto, otro 35% prefería no manifestarse acerca del dispositivo que finalmente adquiriría.
Completando esta encuesta, el 21 por ciento afirmó que iba a cambiar por un modelo diferente de Samsung, mientras que sólo el 18 por ciento dijo que planeaba obtener un Galaxy Note 7 de sustitución, los cuales continúan siendo escasos.
Haciendo la contra a esta encuesta, Samsung afirma que el 90% de los propietarios de un Galaxy Note 7 afectado habían decidido obtener un reemplazo directo, después de que los dispositivos corregidos estén “ampliamente disponibles”. Hasta el momento, más del 60% de los dispositivos defectuosos han sido sustituidos en Estados Unidos, según la surcoreana.
Llamadme escéptico, que lo soy, pero esas cifras no se las cree ni la propia Samsung, aunque tpco creo que la tasa de switchers hacia el iPhone 7 vaya a ser significativa. Probablemente, en el término medio hallemos los resultados definitivos.
En fin, se espera que los envíos del iPhone 7 alcancen la cifra de 80 a 84 millones de unidades hasta final de año, en comparación con los 85-90 millones de dispositivos iPhone 6s enviados en en mismo período de 2015. Si esto fuera así, desde luego, la caída no habrá sido la pronosticada.
