Bien es sabido por todos que Apple siempre ha sido una compañía centrada en los pequeños detalles. Han sido esos pequeños detalles, los que muchas veces han sido el factor diferenciador respecto a otras compañías, quedando a la vista el cuidado que ponen unas y otras empresas en el desarrollo de sus productos y en su filosofía en general.
También es muy conocido que a los desarrolladores y personas encargadas de crear el producto final con el que se va a encontrar el usuarios, muchas veces les gusta dejar pequeñas “sorpresas” escondidas en el sistema, de forma que estos pequeños guiños vayan saliendo a la luz a medida que por fortuna o intencionadamente los encontremos.
Uno de estos “guiños”, quizá uno delos mejor guardados y que más desapercibidos han pasado hasta la fecha, era el que escondía el icono de las notas de voz en iOS 7 y 8. La razón por la que ha tardado tanto tiempo en descubrirse es porque el icono nos muestra simplemente lo que esperamos que sea el icono de una app de grabación: unas ondas de sonido de diferente longitud.
Sin embargo, Mike Rundle ha sabido ver lo que al resto ni se nos había pasado por la cabeza: que esas líneas del icono podían tener algún significado. Y así ha sido, ya que como cualquiera de nosotros puede comprobar en su iPhone, si pronunciamos la palabra “Apple” al tiempo que grabamos una nueva nota de voz en la app, las ondas formarán exactamente el mismo dibujo que compone el icono.
Esta claro que este tipo de cosas no son casualidad y no nos cabe duda de que algunas de estas pequeñas sorpresas también están escondidas en el dispositivo que hoy se pone a la venta y del que tanto se habla. Efectivamente, me refiero al Apple Watch.
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