Probablemente nuestros lectores más manitas hayan probado más de una vez a seguir los tutoriales que publica la conocida iFixit para desmontar un iPhone y lograr cambiar la pieza o piezas que nos están fallando sin pasar por el servicio técnico de Apple. Esto ocurre sobre todo cuando no hay garantía o un seguro que cubra las reparaciones, para evitar los altos costes que Cupertino nos factura por ellas. Pero en otros casos también se produce por los pocos puntos que Apple tiene en la mayoría de lugares, lo que reduce considerablemente las posibilidades de disfrutar de un servicio técnico insitu y aumenta los tiempos de espera. Y es precisamente iFixit la que ha emitido un comunicado en el que critica duramente a la manzana por cómo hace las cosas.
En iFixit no se muerden la lengua. Su CEO Kyle Wiens no ha podido ser más claro al respecto. Considera que Apple no solamente está dificultando la reparación por parte de terceros o del propio usuario a medida que crea nuevas generaciones de productos, sino que la está convirtiendo en una misión imposible, enfocando todo el asunto a una filosofía que a su parecer es realmente poco ética.
Según Wiens, Apple está por la labor de hacer que el usuario tenga tan solo dos opciones cuando se le rompe, se le estropea o se daña parcialmente uno de sus terminales. O bien pasa por un centro de la propia compañía, si es que tiene uno cerca; o bien lo sustituye por uno nuevo con los programas que ya existen en países como EE.UU y funcionan con cierto éxito. Al CEO de iFixit le parece una actitud realmente reprochable, porque según él, todos los gadgets deberían poder arreglarse y las compañías deberían facilitar el trabajo al usuario y no complicarlo.
Sin embargo, por mucho que las declaraciones del CEO de iFixit me encanten a mi, y seguro a muchos de vosotros, no le veo yo a Apple muchas intenciones de dar marcha atrás.
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