Si bien en un primer momento se pensó que lo más probable es que Apple fuera responsabilizada de la muerte de una persona electrocutada con un iPhone 5, la posterior investigación determinó que la firma de Cupertino no tenía culpa de lo sucedido. Y es que la descarga eléctrica que recibió el cuerpo procedía del cargador, en este caso no original.
El cargador, origen del problema
Cuando la noticia se encontraba en el momento de máxima difusión a nivel mundial, otro chico asiático quedaba tendido en el suelo tras recibir otra descarga cuando utilizaba su iPhone mientras lo cargaba. Tras esta serie de acontecimientos, Apple, además de solidarizarse con las víctimas, prometía investigar lo sucedido para depurar responsabilidades. El resultado de los estudios de policía y compañía fue que el teléfono en ningún momento fue causante de la muerte y electrocución de otra persona. En realidad fue el cargador el objeto mortal. En ambos casos se dio la casualidad de que no se trataba de los modelos originales.
Una vez detectado el problema, Apple ha incluido en la página de la firma para el mercado chino una sección desde la que plantean una serie de pasos para determinar si el cargador es oficial o no atendiendo a las especificaciones y códigos impresos en la base de éstos. Si bien la medida puede no ser todo lo efectiva que debiera frente a las réplicas chinas, supone una manera de concienciar a la población de que el uso de accesorios no homologados pueden llegar a ser, en este caso, mortales.
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